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XXVII DIA
DEL ENTRENADOR ARAGONÉS
El sábado 23 de
Noviembre, el Comité Aragonés de Entrenadores de Fútbol, celebró su
tradicional fiesta anual conmemorando el XXVII Día del Entrenador Aragonés.
Un año más, la jornada de amistad y camaradería de los entrenadores de la
Comunidad se desarrolló cargada de emociones y enriquecedoras muestras de
amistad y compañerismo.
En el Salón los Sitios del Hotel Meliá Zaragoza, se reunieron
doscientas personas para celebrar la tradicional fiesta que cada año reúne a
los técnicos aragoneses.
Bajo la
dirección del Presidente del Comité Aragonés de Entrenadores de Fútbol, D.
Antonio Molinos Granada, con la presencia de D. Oscar Flé Latorre, Presidente
de la Federación Aragonesa de Fútbol, D. Ramón Cobo Antoranz, Presidente
del Comité Nacional de Entrenadores, Jaime Sabaté Mercade, Presidente del
Comité Catalán de Entrenadores, D. Manuel Casanova Larrayad, Jefe de
Servicios de la Diputación General de Aragón, los consejeros del Real
Zaragoza, D. Alberto Vitoria, D. Vicente Merino, y el Secretario General de la
misma entidad, D. Francisco Checa, se iniciaron los actos del XXVII Día del
Entrenador.
Tras
degustar las viandas de la cena, la Escuela de Entrenadores Aragoneses procedió
a la entrega de Títulos y Diplomas a los treinta alumnos que habían superado
los diferentes cursos de fútbol once y fútbol sala.
Posteriormente, el Presidente del Comité Aragonés, D. Antonio Molinos pasó
a recordar los historiales de cuatro compañeros que la Junta Directiva del
Comité Aragonés quiso premiar con unas distinciones “Menciones de Honor”
por su dilatado trabajo en pro del fútbol de nuestra Comunidad y su cantera
de jugadores. Los cuatro “jóvenes en ilusiones” con amplia experiencia
cada uno en su peculiar faceta fueron: D. Pedro De las
Heras Martínez, D. Mariano Estrada Fortún, D. Manuel Franco Cabello y
D. Antonio Gracia Herrero. Los cuatro se emocionaron y alguno dejó escapar
alguna lagrimilla. Sin duda un merecido reconocimiento que todos los
asistentes premiaron con un cálido y cerrado aplauso, premiando muchos años
de intensa dedicación al mundo del fútbol.
Tras premiar a unos entrañables compañeros, se procedió a imponer el máximo
galardón que el Comité Aragonés de Entrenadores de Fútbol concede a los técnicos
de nuestra región, la Insignia de Oro. En esta ocasión le correspondió en
solitario al amigo Miguel Pérez Alloza, al cumplir veinte años de
infatigable labor en los diferentes banquillos de equipos aragoneses. Un
hombre tremendamente trabajador y que casi siempre ha estado ligado al fútbol
formativo. Un acto de imposición de insignia al más alto nivel, ya que fue
nuestro primer espada, el Presidente del Comité Nacional de Entrenadores, D.
Ramón Cobo Antoranz, el
designado para imponer en la solapa a D. Miguel Pérez Alloza, la Insignia de
Oro que otorga el Comité Aragonés de Entrenadores de Fútbol, como premio a
una larga etapa de peregrinar por los diferentes banquillos de los equipos
aragoneses.
El
Presidente del Comité Catalán, D. Jaime Sabaté, entregó un recuerdo
personal a su amigo, el presidente de los entrenadores aragoneses, D. Antonio
Molinos, que éste agradeció.
Tras los
pertinentes discursos del Presidente de la Federación Aragonesa y del Comité
Nacional se dio por concluido el acto, pasándose al tradicional sorteo de
regalos, que en esta ocasión, la Diosa Fortuna, “sabia ella” llevó los
mejores y más apreciados premios a las jóvenes promesas de Entrenadores que
asistieron al acto.
Una
grata velada que puso colofón al XXVII Día del Entrenador Aragonés que un año
más contó con una nutrida representación de todos los colectivos del fútbol
de nuestra Comunidad y masiva representación de entrenadores afiliados al
colectivo aragonés.
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